No se le puede exigir al alacrán que sea otra cosa y luego culparlo por hacer lo mismo de siempre, picar. Del mismo modo no se le puede pedir a Macri que sea otra cosa, prometer y no cumplir es una de sus características, y es lo que hizo antes de asumir, no se puede decir que no sea fiel a sus convicciones.
Un verdadero mago, dice por aquí, hace lo de allá.
Tampoco se le puede exigir a la gente que piense distinto, a la mitad que no votó a Macri le cuesta admitir que las propuestas de Macri, no les preocupa, que están conscientes que no se cumplirán, eran obviamente un mensaje para los indecisos, los que rechazaban a cristina porque se dejaron llevar por el mensaje detractor de los medios, esos, son los únicos inocentes en este proceso.
Por lo demás, a mucha gente le parece viable tener deudas en vez de prescindir del último modelo de celular, total, no sufren por lo que apenas si les afecta el bolsillo.
Tampoco les molesta que no haya atención adecuada en los hospitales, no los usan, y estamos acostumbrados, ya como especie, más que como individuos a ignorar lo que no queremos ver, es una protección filogenética; la razón, la educación, es la que organiza el sentido de cuidado del otro, es un acto que tiene vencer el natural instinto de atender los propios deseos aún en detrimento de muchos.
Los que votaron a Macri saben que tendrán que pagar tributo a sus deseos sueltos, pero pueden pagarlo, de manera que no les importa.
Luego, todo lo que signifique ayuda social, al votante Macri le parece que sale directo de su bolsillo y que de los bolsillos de muchos más salen los caprichos que se dan a sí mismos, pero estiman que es la ley del más fuerte, la viveza para eso es un orgullo, no un acto de injusticia, la razón no es tan alejada de todos, así vivimos diariamente en los trabajos, en las oficinas, la ley del más vivo, el que mejor confabula, el que saca mayor ventaja.
La falta de infraestructura en las escuelas es otro ítem que tampoco está en la agenda del votante de Macri, en todos los niveles, ellos esperan que los ciudadanos se hagan cargo, se paguen colegios privados, se paguen universidades privadas y que desaparezca la universidad pagada por el estado, ellos no piensan que el país necesite de lo que consideran una dádiva innecesaria.
El votante Macri, no seamos ingenuos, saben a quién votaron, y eso es exactamente lo que querían y lo que tienen.
Macri, sabe esto mejor que la otra mitad, y por ello se dio el lujo de anunciar las medidas neoliberales desde antes de la votación, con la seguridad de que lo que llevará adelante goza del consenso de los que lo votaron.
La otra mitad, tendremos a ajustarnos o perecer.