La NASA informa que se está midiendo las temperatura del planeta, tomando como puntos de referencias grandes extensiones desérticas.
Aunque parezca de otro planeta, el desierto Dashet e lut, en Irán, registró un poco más de 70 grados en mediciones de varios años.
Estos datos se recaban desde el satélite, ya que con esa temperatura no es posible la vida tal como la conocemos.
Declarado inhabitable para la vida, es un buen indicador de cómo será la temperatura hacia la cual evoluciona el planeta.
Los sistemas de detección de temperatura ayudan a determinar la evolución de la temperatura en el planeta, con ayuda de instrumentos de alta tecnología, se están marcando registros preocupantes.
En Australia, se han detectado también zonas desérticas cercanas a los 70 grados en el año 2002.
El país con habitantes viviendo en condiciones de calor extremo es Etiopía, en la cual se registran temperaturas constantes superiores a los 36 grados, sin alivio pluvial.
El problema de la temperatura es grave, provoca fenómenos como el niño, que a su vez suma a su paso zonas de desierto que se extienden cada vez más.
El mayor problema son los países que mantienen altas temperatura constantes, mientras en países como Argentina contamos con varias estaciones, lo que hace que las diferencias de temperaturas se soporten mejor, en Etiopía el calor es constante.
Un grupo de investigación de expertos en clima midió la temperatura en diversos puntos y estableció algunas causas que provocan el proceso de desertificación, el calentamiento global a la cabeza, la invasión de zonas que son pulmones geográficos, la desaparición de los glaciares, el trasplante de especies de fauna vegetal que en zonas que agreden el suelo y el entorno para regenerar condiciones de deshidratación, cuyo principal culpable es el hombre mismo.
El problema está lejos de solucionarse y va en aumento, los gobiernos preocupados por las urgencias de sus economías, desatienden este problema para el cual no parece haber políticas adecuadas y mucho menos métodos en evaluación o tan siquiera pruebas.
El planeta está cada vez más caliente, y el clima lo muestra a cada instante generando condiciones exageradas, inundaciones, terremotos y otros, forma de expresarse que tiene la naturaleza para advertirnos de nuestros excesos.
El planeta, sordo y ciego, aunque no mudo.