Cualquier construcción bien diseñada y planificada desde su base comprende también la durabilidad y eficacia de los materiales empleados en la construcción de tejados, fachadas y paredes interiores en general. En este sentido, hablamos de todo tipo de edificios, desde viviendas hasta naves industriales, si bien hay un tipo de material que se adapta de una manera extraordinaria al segundo caso y a espacios laborales con alto índice de uso de maquinaria. Estamos hablando de la posibilidad de comprar paneles sándwich, un material versátil que se compone de dos chapas de acero y una inyección interior de poliuretano.
Lo primero que debemos destacar de los paneles sándwich es la increíble versatilidad de sus usos múltiples. No solo sirve para erigir fachadas, sino también como sustituto de los tejados tradicionales. Por eso es tan recomendable en naves industriales, porque, además de ser un producto aislante fuerte y duradero, ha sido especialmente diseñado para servir con una doble función aislante: térmica y acústica. Así, por un lado, el calor elevado del trabajo pesado y mecánico del interior en muchos sectores de la construcción o similares no traspasará los paneles.
Pero el aislamiento acústico también es digno de mención y un buen motivo para investigar el precio del panel sándwich. Aunque en muchas ciudades existen zonas industriales concretas, en otros muchos casos las áreas de trabajo están cerca de núcleos vecinales y zonas residenciales. En esos casos, el ruido diario y constante del trabajo industrial puede ocasionar molestias. Sin embargo, una nave construida en su totalidad con este tipo de material no resultará un problema de contaminación acústica para las personas de las cercanías.
Por otro lado, en los tiempos que corren, comprar paneles sándwich ofrece una tercera ventaja: gracias al poder aislante general del material, es más sencillo mantener a los trabajadores en condiciones de seguridad y distancia frente a la incidencia causada por la pandemia de la COVID-19. En definitiva, este material es cada año que pasa más exitoso entre los arquitectos y los diseñadores industriales, ya que su capacidad en múltiples sentidos está más que demostrada y resulta muy eficaz.