Adquirir una casa es difícil, pero no imposible. Ante todo, tenemos que tener en cuenta qué gastos estamos dispuestos a asumir y calcularlos con eficiencia, al menos antes de cometer el error de lanzarse a la aventura de pedir una hipoteca a nuestro banco de confianza.
Hacer algo así sin un análisis previo de nuestra capacidad adquisitiva podría ser un suicidio económico. No así si tomamos la sensata decisión de calcular hipoteca en sitios web online habilitados para ello y con el fin de tener una idea, más exacta que aproximada, del valor de los fondos financieros que estamos dispuestos a pagar por la compra de una casa.
Las condiciones, a grandes rasgos, dependen de cada empresa inmobiliaria. En ocasiones un edificio no ofrece compra de inmuebles, sino alquiler, o viceversa. Otras veces, es posible alquilar una vivienda con opción de compra futura.
Es necesario indagar y hacer una lista de aquellos pisos o casas que en principio más satisfacen nuestras necesidades, visitarlos en persona y establecer una comparación entre la calidad de la vivienda y su precio inicial.
Cuando hablamos de calidad no nos referimos solo a reformas, sino a lo importante que es que la casa en cuestión tenga todos los documentos esenciales en regla, como el certificado de eficiencia energética.
En caso de que el potencial hogar que hemos escogido necesite unas reformas, la decisión sigue siendo nuestra: descartarla y buscar inmuebles más modernizados y adaptados a nuestras cifras de inversión iniciales, o investigar las condiciones de solicitud de préstamos rápidos o subvenciones públicas y privadas.
Sigamos el camino que sigamos, saberlo absolutamente todo de la principal candidata es indispensable, sobre todo de cara a ese cálculo ineludible de la hipoteca inicial que hemos mencionado antes. Todo influye: desde los metros cuadrados y el número de habitaciones, hasta si el suelo es urbano y rural.
En el segundo caso, por cierto, puede existir un ahorro considerable. Una vez hayamos aclarado los puntos más importantes y sepamos los pros y los contras, podremos dar el paso. Darlo con conocimiento de causa es sin duda la mejor opción.