Literatura, relatos, crítica literaria, Metaliteratura revista de literatura
Por qué Juan José Saer es un gran escritor, es una pregunta recursiva, seguramente porque sus textos eluden la lectura superficial, es la respuesta más directa, pero cuando algo parece invisible y hay que dar explicaciones, no parece que fuera buena literatura.
La respuesta es sencilla, calzar en ella, sólo los grandes escritores. Lamentablemente o no, Saer es un escritor argentino que siempre se ha mantenido al margen de esa discusión, su obra, es tenaz en un movimiento usual de la literatura: establece un sentido en una nueva y distinta forma de escribir en relación a su época, a los escritores que lo precedieron.
Su escritura es lenta, pormenorizada, diseña imágenes centradas en detalles que construyen un clima preciso, con una percepción crítica de lo temporal.
Juan José Saer es como un faro en la literatura latinoamericana, una luz potente por su forma de irradiar en la oscuridad.
Saer promueve, en su poética un arte sin sujeción a mensajes directos, el único compromiso que subyace es la negatividad, la diferenciación proviene de una época de producción, donde los motivos sociales y políticos hacen su avance sobre la literatura, una escaramuza con el arte de manipular a las masas, Argentina es un país oprimido y la naturaleza de la literatura que prolifera, la contestaría, la testimonial, la documental, difiere de los proyectos de Saer, para quién la poética es un forma de dar cuenta de un mundo que no le es posible reponer con optimismo.
Juan José Saer, fue capaz de confeccionar su propio universo narrativo, colocarlo en un lugar físico, y a sus habitantes les dio el soplo vital, con características tan distintivas y reconocibles que ya son un sustantivo; - al modo onettiano, con u personaje Juntacadáveres-, Saer cuenta con un grupo de personajes con los que elabora los diferentes puntos de vistas sobre la vida, con un espacio ficcional propio, y prácticamente se sumerge en la creación de un nuevo género, la novela ensayo, híbrido entre historia, policial, y una escritura rítmica, detallada, en la que despliega narraciones de un mismo hechos, desde diferentes puntos de vista.
Este panóptico de relatos circulan como en un vértigo de frases largas que ponen en escena un universo rico en entorno que a pesar de ser novelas de textos complejos, sobre todo las disquisiciones de los diálogos, han sido material de cine, la exhaustiva descripción se asemeja a las cámaras filmadoras que colocadas en diferentes ángulos apuntan a hechos como ocurren en la vida real, cada testigo es una voz diferente y cara voz es una interpretación.
Saer cuenta con una extensa obra en la que da cuenta de su literatura, pero mi recomendación es comenzar con Cicatrices, su novela más cautivadora, aunque en mi opinión, Glosa es una de las mejores.
Cicatrices son cuatro personajes que dan cuenta de un mismo hecho, cada uno desde su punto de vista, este procedimiento, describe muy bien la narrativa de Saer, no hay una verdad hay interpretaciones; el escenario del entorno es el peronismo, proscripto en esa época, en el día del trabajador un obrero metalúrgico mata a su esposa. Los cuatro personajes convertirán sus testimonios en verdadero documentos sobre el arte de Saer en diseñar una estrategia discursiva para crear un mundo ficcional con artificio escritural.
Aún al margen de los escritores más leídos, de la mano del Boom latinoamericano, Juan José Saer nos organiza el mundo desde el lenguaje, presente en su época, ausente en estrategias narrativas del momento, creando las propias.
Especialista en potenciar, con la anécdota mínima, rol y vida de personaje inolvidables, es escritor argentino, deja una estela importante como una marca distintiva en la literatura latinoamericana.
Además de novelas y cuento, Juan José Saer ha dejado una textos de ensayos que no dejo de recomendar.
Este autor ha incursionado en todos los géneros, poesía, ensayos, cuentos, novelas; siempre que se “resuena” con un autor es fácil intentar leer toda su obra, la cual es prolífica e imprescindible para cualquier escritor que se quiera formar en la época actual, Saer era una vanguardia en su época, la mezcla de géneros le debe obras impresionantes en las que el trabajo de creación de personajes, diálogos, descripción del entorno es escuela para escritores.
